Blogia
Luz en la ventana

Enséñame a ser feliz

"Pájaros de Portugal" /Joaquín Sabina

Si digo que no he tenido tiempo ni para mirarme las uñas, mentiría, porque me las he arreglado cada vez q han estado mal, jejeje. Pero si digo q no he tenido tiempo ni para pasarme por aquí, seguro q ya se me cree más. He estado muy ocupada, bueno, más q ocupada, he estado ida, como diría yo. Me he dejado ir un poco por mis pensamientos, y he acabado pensando cosas q no debería haber pensado, pero que en el fondo, casi creo q son necesarias, porque te hacen darte cuenta de que en esta vida todo se soluciona a base de aprender; y te das cuenta de que los malos pensamientos también te sirven para darte cuenta de la cantidad de buenos pensamientos q también puedes encontrar en ti. En el fondo es eso, todo se supera gracias a la esperanza y a las personas que te quieren y te aman.
En un principio (“Dios creó al hombre y a la mujer”, jajajaja, no) estuve muy nerviosa, porque me enfrentaba a un examen para el q me había preparado, pero para el q no me veía preparada realmente. Después, pensé q la suerte estaba echada, y q sólo debía intentar ser feliz teniendo a R aquí, conmigo. Fui muy feliz, como hacía mucho tiempo q no lo era. Disfruté muchísimo, y apenas lo pasé mal cuando tuvo que marcharse, así que fue maravilloso tenerlo de nuevo conmigo. Además, se fue con una alegría enorme: había sacado un 6 en mi examen!!! Me sentí orgullosa, me sentí feliz, contenta, tanto, que creo q todo eso aminoró el hecho de q R volvía ese día a su ciudad.
Pero todo ese estado de ánimo cambió en poco tiempo, apenas dos días. No tenía esperanzas de aprobar mi otro examen, tampoco me animaba ya sentirme orgullosa de mi nota. Para colmo, estuve unos días sin ver a R, o hablando muy poco con él, y eso me hizo sentir muy sola, sin nadie a quien poderle decir todo lo q sentía y pensaba realmente.
Y lo q pensaba era algo muy importante para mi vida, mi vida profesional, quiero decir. Ahora no quiero pensar en eso, prefiero no pensar, porque ya todo pasó, y ahora todo está tranquilo, y me gusta q sea así.
Estuve muy mal, y lo pagué con gente q no tenía la culpa de nada, como mi familia y mi pareja. Pero él, aunque se de mil veces contra el muro que dice q a veces lo le pongo por delante, es muy burro (jajajajaja) y sigue erre q erre, ayudándome, apoyándome, haciéndome reaccionar. Y creo q no abrí realmente los ojos hasta hace tres días, cuando sentí y oí todo el daño que estaba haciéndole sin quererlo. Me dolió mucho verlo así, y también me dolió mucho no poder hacer demasiado, porque a veces me pongo mal sin saber el por qué, y me enfado sin saber por qué, y contra eso muchas veces no puedo hacer nada. Tengo q evitar q él vuelva a estar mal por mi culpa, porque no es justo, ni para él, ni tampoco para mí.
Ha sido él el q me ha ayudado a estar mejor, a sentirme más segura, a seguir adelante, y a hacerme ver lo valiente q soy (realmente) y lo mucho q valgo, y también lo orgulloso que está de mí, q es algo q me alienta muchísimo.
No sé si podría dar las gracias, porque a mí de pequeña me enseñaron que en vez de eso, siempre se pedía más (de lo q fuese). Y él sabe, aunque no se lo haya dicho directamente, q siempre quiero más de él, y q siempre le voy a querer más. Ahora mismo ya no sé q sería mi vida sin él, y tampoco quiero descubrirlo. Pero sí sé q estoy dispuesta a q me enseñe a ser feliz.
Te amo, R.

Ahora en mi mesilla... El peso del silencio /Jordi Sierra i Fabra.

1 comentario

R -

a veces me parece que no estoy con una persona, sino con una montaña rusa. Subes, alto, más arriba que nadie, y estallas; y cuando caes, te hundes, hasta los límites más bajos que nunca he visto.
Me arrastras, me mareo en ti.
Me cuesta mantener la calma a veces y reaccionaría muy mal si estuviera a tu lado, ... por suerte en esos momentos no lo estoy. En serio, no sé como reaccionaría.
Y sigo frente a ti, contigo, amándote.
Una vez alguien (un chico, no te preocupes, y fue hace mucho tiempo) me contó lo siguiente:
“No te amo a ti, ni ante ti, ni bajo ti, ni cabe ti, ni con ti (go), ni contra ti, ni de ti, ni desde ti, ni en ti, ni entre ti, ni hacia ti, ni hasta ti, ni para ti, ni por ti, ni según tú, ni sin ti, ni sobre ti, ni tras ti. Te amo sin preposiciones, como eres”.
Un beso, cielo
R